LIBERTAD, DEMOCRACIA Y HUMANISMO. EL RAPONAZO A LA DEMOCRACIA.
BOGOTÁ, DICIEMBRE 28 DE 2025
EL RAPONAZO A LA DEMOCRACIA.
ESTE ESCRITO FUE REDACTADO Y PUBLICADO EN TWITTER EL 16 DE NOVIEMBRE DE 2015 CON MI FIRMA, ANTONIO VARELA ARDILA. LO REPUBLICO PORQUE ES UNA VISIÓN DEL FUTURO PRESENTE, CUYOS DESTINATARIOS JAMAS ME CREYERON PERO SON DE UNA LOGICA TAN ELEMENTAL COMO CONTUNDENTE ES SU VISIÓN.
PRIMERA PARTE DEL RAPONAZO DE LA DEMOCRACIA.
EL RAPONAZO DE LA MONTONERA DE LAS FARC, AL EJERCICIO
DEL CONTROL POLÍTICO POPULAR.
Dentro del Titulo segundo de la
Constitución Política, se encuentra el capítulo correspondiente a los derechos
Fundamentales. El artículo 40, precisamente el 40, imperativamente dispone que
todo ciudadano “tiene derecho a participar en la conformación, ejercicio y
control del poder político”. Es un
derecho de 47 millones de colombianos, en acto o en potencia de hacer uso de
él. Para ello debe tomar parte en
elecciones, plebiscitos, referendos o cualquier de estas formas masivas
electorales de participación democrática. Es el ejercicio de la plena
democracia que el tejido social distorsiona, pero que en cualquier momento,
como sucedió el 19 de abril de 1970, el pueblo se vuelca a las urnas y cambia
el destino o predestinación de lo que los arúspices y conspicuos del momento
dispusieron en contra del querer de la gran mayoría. A propósito, fueron los
guerrilleros del M-19, quienes votaron en la constituyente del 91, el actual
estatuto de los derechos fundamentales. Hoy otros guerrilleros que quieren
igualarse llegando al Chicó, pretenden desdibujar la democracia de todos para
todos, por el de una montonera contra todos, como ha sido en los últimos 50
años. Prevé la constitución el mecanismo de participación del pueblo en
ejercicio de su soberanía, en su artículo 103; entre ellos el Plebiscito, el
referendo, la consulta popular, la revocatoria, etc. Nada menos que en el
titulo de la participación democrática y de los partidos políticos, se
encuentra esta norma, desarrollo del derecho fundamental “que tiene todo
ciudadano a participar en la conformación, ejercicio y control del poder
político”.
Como el Poder Político de la
actual legislatura, a pesar de su aglutinamiento alrededor del Gobierno que
maneja el Estado, ha sido desbordado por el sentir manifestado indeleblemente
del pueblo víctima directa o indirectamente, pero que se siente, se percibe,
como se percibe el suave rumor de las olas al llegar a las playas o el del
viento al pasar entre los arboles de lo que queda de la selva, o entre los
cables y muros del concreto citadino, les ha dado un campanazo de alerta de lo
que le podría suceder a un esperpento jurídico firmado en la Habana, en donde
se otorgue impunidad a los delincuentes, se le de vía libre al narcotráfico, se
les reconozca legalidad a su riqueza fruto del narcotráfico, del secuestro, del
robo, etc., se pase sobre las víctimas hundiéndolas en la miseria absoluta y en
el desprecio por el ser humano, entonces decidieron reformar la Constitución
para neutralizar la voluntad inmensamente mayoritaria del pueblo, desconociendo
la democracia que nos ha regido, reduciendo la participación, cercenando
derechos, acomodando la reforma constitucional a lo que la camarilla de la
Habana necesita para llegar a los centros de control geo-políticos y económicos
del país, convirtiéndose en los nuevos padres de la patria, en los nuevos
cacaos, con más dinero, así sea sucio, pero dinero y con respaldo de gente
allende los mares, que mira con simpatía a ISIS y sus métodos para conquistar o
mantenerse en el poder.
Las fuerzas vivas del País no
pueden ser espectadores inermes de este ataque frontal a la democracia y a la
toma del poder por una camarilla delincuencial que todavía abreva en su fuente
orientadora ideológica en las canteras de la Revolución Bolchevique y en los
postulados de Lenin para usurpar el poder, de los Zares de entonces. Algo
tenemos que hacer antes de que se consuma este raponazo institucional a la
soberanía popular.
Comentarios
Publicar un comentario